Anika es una madre valiente, que recientemente ha llegado a España con sus tres hijos. Su hijo mayor, Iván, sufre de distrofia muscular de Duchenne, una enfermedad que le impide caminar y le dificulta mover sus manos. La familia se ha instalado en España, pero se encuentran enfrentando una situación desafiante.

El piso que Anika ha alquilado se encuentra en la primera planta y no tiene ascensor. Esto presenta un gran problema, ya que Anika tiene que llevar a Iván a su espalda cada vez que necesitan subir o bajar. La dificultad de esta tarea es abrumadora, y Anika sabe que necesitan ayuda urgente para mejorar su calidad de vida. 

Desesperada y sintiéndose un poco perdida en un país nuevo, Anika decidió escribir a alguna asociación o entidad en busca de ayuda. Buscaba una solución para su difícil situación. Necesitaba un lugar donde vivir que fuera accesible para Iván, un piso que tuviera ascensor o que estuviera en la planta baja. 

Pero las preocupaciones de Anika no se detenían allí. La silla de ruedas de Iván estaba en mal estado y necesitaba ser reemplazada. Además, cargar a su hijo era físicamente agotador, y ella sabía que necesitaban una grúa para levantarlo con seguridad. También estaba preocupada por la falta de fisioterapia para Iván desde su llegada a España, sabiendo que era esencial para su salud y bienestar.

Anika escribió a INDEPF con esperanza, buscando apoyo y solidaridad en su nuevo hogar. Esperaba que alguien pudiera ofrecerles una mano amiga, ya sea ayudándolos a encontrar un lugar adecuado para vivir, donando una silla de ruedas en buen estado, proporcionando una grúa o conectándolos con servicios médicos que pudieran mejorar la calidad de vida de Anika.